Por El Universal |
Ante una multitud que entorpece su paso, la Presidencia de la República acercó su auto al presidente López Obrador, para que pueda abordarlo y dirigirse al Zócalo, pues los empujones han complicado su avance.
Integrantes de su equipo cercano buscan abrirle paso al vehículo del titular del Ejecutivo para agilizar su llegada al Zócalo.
López Obrador marchó por Reforma del Ángel de la Independencia y llegó un poco más adelante del Senado de la República al momento de que le acercaron el auto.
Las calles aledañas a Reforma están completamente llenas lo que impide el avance del contingente que encabeza el titular del Ejecutivo.
El presidente decidió no abordar el auto y por ahora continúa a pie. Lleva poco más de tres horas de marcha.
El presidente convocó a una marcha luego de una de simpatizantes del INE; afirmó que si bien no conoce el futuro, esta podría ser su última marcha.
Las calles, Paseo de la Reforma y el Zócalo capitalino lucen abarrotados.
“Vine desde Los Ángeles, nadie me pagó el viaje”
“Vine desde Los Ángeles, California, para participar en la marcha del Presidente. No soy morenista, soy obradorista y nadie me pagó el viaje ni el hotel”.
Dijo a El Universal José Manuel Alfaro, jalisciense de nacimiento y quien desde hace 30 años emigró a Estados Unidos.
Acompañado de cuatro familiares, el empresario llegó el jueves 24 de noviembre a la Ciudad de México para participar en la marcha convocada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Estoy en este hotel -Sheraton- junto con mi familia. Dime si soy acarreado, ¿quién me lo va pagar? Vengo por convicción y con mi dinero”, dijo frente al Ángel de la Independencia.
Al igual que él, decenas de migrantes que residen en California, Chicago y Texas arribaron para participar en la marcha.
