Por Redacción |
La historia de Shanti de Corte parece un drama de la televisión, pero no lo es. Su caso representa los severos estragos ocasionados por el terrorismo, el sistema de salud y la ética de la medicina.
Medios internacionales recortaron el caso de la joven de 23 años cuyos últimos días de vida fueron un calvario mental, pues el daño que la acercó a su muerte surgió cuando tenía solo 17 años.
En 2016, Shanti de Corte, esperaba con sus amigos en el aeropuerto de Bruselas para tener un viaje de graduación.
Cuando caminaba por la sala de abordaje del aeropuerto belga junto a sus compañeros de clase, antes de tomar un vuelo con dirección a Italia, sucedió una explosión.
La joven de 17 años escapó de la explosión inicial, en su huida hubo otras dos detonaciones que cobraron la vida de 32 personas e hirieron a más de 300. El ataque perpetrado en contra del aeropuerto se lo adjudicó el grupo terrorista Estado Islamico.
Pese a haber sobrevivido al ataque terrorista del aeropuerto de Bruselas, murió 6 años después de los sucesos.
Aunque Shanti de Corte no sufrió heridas físicas después del atentado terrorista, los estragos emocionales que sufrió ese día la marcaron irreversiblemente. La joven nunca pudo recuperarse de los constantes ataques de pánico y la severa depresión que sentía. Fue asistida y apoyada por familiares que decidieron internarla en un hospital psiquiátrico ubicado en la provincia de Amberes, Bélgica.
Un abuso que llevó a Shanti corte al límite su salud mental
Durante su estancia en el hospital psiquiátrico, Shanti de Corte fue abusada sexualmente, esto empeoró su estado de salud mental.
Pese a las atenciones médicas que recibió, Shanti de Corte nunca logró superar su trauma e intentó quitarse la vida en 2018 y 2020, pero en 2021 solicitó la eutanasia. Ya que fue diagnosticada con un severo estrés postraumático por varios psiquiatras.
La mujer finalmente recibió la autanasia en mayo pasado.
Entre los principales síntomas característicos del estrés postraumático son:
-Ansiedad
-Paranoia
-Psicosis
-Angustia
-Malestar
-Depresión
-Disociación
-Delirios de persecución
Tomaba 11 medicamentos psiquiátricos, antidepresivos, estimulantes, antipsicóticos,, entre otros. Por ello, Shanti de Corte, manifestó:
“No puedo vivir sin eso y con todos los medicamentos que tomo, me siento como un fantasma que ya no puede sentir nada”.
Tras no poder recuperar su salud mental, la joven de 23 años pidió la eutanasia por un “sufrimiento psiquiátrico insoportable”.
¿Qué es la eutanasia?
La eutanasia es la práctica de poner fin intencionalmente a la vida de una persona mediante procedimientos que consigan una muerte asistida, indolora. Es usada en pacientes con enfermedades terminales o con padecimientos crónicos que producen demasiado dolor en su día a día.
La eutanasia es un método médico muy polémico. Sin embargo es visto como la única forma de dar una muerte digna al que más sufre, en favor de su salud mental y paz. Uno de los procesos más comunes en este procedimiento es someter al paciente a una intoxicación de dióxido de carbono, con el fin de hacer su muerte tranquila.
En cada país existe una normativa para el uso o la prohibición de la eutanasia, en Bélgica es legal desde 2002.