Por Javier Arroyo |
En trabajo conjunto con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) México, autoridades estatales y federales establecieron el Protocolo para el Acceso de Niñas, Niños y Adolescentes en Situación de Migración a la Educación.
El Protocolo busca garantizar el acceso a la educación de todos los infantes y jóvenes, tanto nacionales como extranjeros, que se encuentran en situación de movilidad en Ciudad Juárez.
La presentación del mecanismo se realizó en un auditorio de la Unidad Administrativa José María Morelos y Pavón (Pueblito Mexicano) con la participación de Astrid Hollander, jefa del Área de Educación de Unicef México.
Hollander destacó que la educación es un derecho humano fundamental para niñas, niños y adolescentes (NNA), con independencia de su nacionalidad y el lugar en el que se encuentren en tránsito.
Explicó que el documento garantiza seis etapas fundamentales aplicables a todo menor en situación de migración: solicitar el ingreso educativo a un plantel escolar en México; ser aceptado haya cupo o no y ser inscrito, cuente o no con documentos de identidad oficial.
Además, el menor tiene derecho a la ubicación en el grado correspondiente con base en los conocimientos, madurez y equivalencias, según sea el caso.
También tiene derecho a obtener la documentación que certifique la conclusión de estudios o evaluación, al momento de ponerse de nuevo en movilidad, así como a la emisión de una boleta o certificado, independientemente de contar o no con CURP o Renapo.
Maurilio Fuentes Estrada, subsecretario de Educación Zona Norte, destacó que el Protocolo es importante porque cada día llegan más niñas y niños migrantes a esta ciudad.
”Lo esencial es que, por derecho, no se les puede negar la entrada a la educación en ninguno de nuestros planteles, aun cuando no traigan papeles, hay migrantes de Haití, de Brasil, de Venezuela, así como de otros estados de la República”, expresó.
Reconoció que no se tiene el dato exacto del número de infantes en situación de migración, precisamente por su constante movilización, “pero lo que sí tenemos, es la capacidad de inscribirlos en nuestras escuelas”.
Oscar Ibáñez Hernández, representante de la gobernadora Maru Campos Galván en Ciudad Juárez, indicó que cuando el migrante llega a un lugar, no tiene un círculo de soporte social y no cuenta con documentos, por lo que el Protocolo es valioso, ya que les brinda acceso y certeza sobre la continuidad de sus estudios.
“Esto se vuelve un espacio donde las y los migrantes pueden tener una voz, un acompañamiento, por ello, la labor de Unicef es valiosa y reconozco el trabajo que realizan los directores y profesores de las escuelas, pues finalmente son quienes deben estar sensibilizados y contar con las herramientas necesarias para facilitar la acogida de estos niños”, indicó.
En la presentación del Protocolo también estuvo Ignacio López, jefe de la Oficina Unicef Juárez y representantes de la Dirección General de Acreditación, Incorporación y Revalidación (Dgair) y de la Secretaría de Educación Pública (SEP). Además, Enrique Valenzuela, coordinador general del Consejo Estatal de Población y Rosella Yamada Vargas, encargada del Despacho de Sipinna.