La gobernadora Maru Campos Galván aseguró que no permitirá que policías de Nuevo Casas Grandes, señalados de tener vínculos con el crimen organizado, sigan trabajando a pesar de haberse amparado.
“Son personas que no merecen la tarea de servir y proteger a la ciudadanía. No permitiremos que ningún policía que haya reprobado y no tenga su control de confianza que no esté profesionalizado”, sentenció en rueda de prensa.
A principios de este mes, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado retiró las armas de 81 elementos del municipio de Nuevo Casas Grandes porque no se sometieron a los exámenes de confianza y por tal motivo fueron cesados de la corporación.
“Lo que es peor, sabemos que están, de alguna forma vinculados con el crimen organizado. Este es un posicionamiento por parte de Gobierno del Estado y no los vamos a dejar que sigan trabajando”, sentenció la mandataria.