Por Martín Orquiz |
En medio de la polémica generada por la permanencia de migrantes provenientes de Venezuela en el bordo del río Bravo ante la exposición a las temperaturas frías, el Gobierno del Estado indicó que impedirá que menores de edad sean puestos en riesgo y, de ser necesario, los pondrán bajo resguardo.
El representante de esa instancia en Ciudad Juárez, Óscar Ibáñez Hernández, aseguró que funcionarios permanecen pendientes del resguardo de los menores, por lo que está en comunicación constante y diaria con Protección Civil, el Municipio, la federación y con el Desarrollo Integral de la Familiua (DIF).
Se busca, indicó, que ningún menor duerma a la intemperie; hasta ahora, por las noches, se resguardan en lugares seguros.
“Hemos visto que las familias o los menores se quedan en hoteles en la noche, no se quedan a la intemperie, estamos asegurándonos de que no se queden menores en el campamento”, mencionó.
En un caso extremo, agregó, las autoridades estatales estarían obligadas a llevarse a las y los menores de ahí físicamente para resguardarlos, por lo que cada día se realiza un monitoreo puntual para medir la situación.
También tiene contacto con la Subprocuraduría del DIF y con la presidente del DIF, María Eugenia Galván Antillón, por este tema y por las alertas que està enviando Protección Civil.
Ibáñez Hernández aseguró que en el campamento establecido en el río hay personal del estado de forma permanente a través de Coespo, Protecciòn Civil, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) y de la Subprocuradiría del DIF.
“Lo que se hizo en una primera instancia, es que se habilitó un refugio especial para niños, niñas y sus padres en el albergue Juntos por la Niñez para tener una alternativa y no quedar en haber qué pasa en caso de alguna contingencia climática”, indicó.
Agregó que la salud de los migrantes, de cualquier lugar de origen extranjero o nacional, se brinda a través del Centro Todos Somos Mexicanos, a donde puden acudir si presenta algún síntoma.